El Pulso Laboral

Lunes 25 mayo 2015

02:30 pm

Seguridad Social

Reprueba México en atención de enfermedades crónicas

Por: Claudia Cervantes

A pesar de la cantidad de recursos que se asignan a Diabetes Mellitus e Hipertensión Arterial los resultados de su atención son pobres, lo que se refleja en porcentajes muy bajos de pacientes controlados, afirmó Nora Alcántara, investigadora del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM. 

"Sólo 24.5 por ciento de los pacientes diagnosticados con diabetes en México están bajo control. De los pacientes con diagnóstico previo de hipertensión, se ha observado que 51.2 por ciento muestran cifras por debajo del punto de corte para control", afirmó.

La enorme carga financiera que genera el tratamiento de las enfermedades crónicas no transmisibles y los pobres resultados de su atención impulsaron la creación, dentro de la Secretaría de Salud (SSa) y los Servicios Estatales de Salud (SESA), de las llamadas Unidades de Especialidades Médicas de Enfermedades Crónicas (UNEMES-EC).

El objetivo principal de estas unidades es contribuir a prevenir y tratar las enfermedades de mayor prevalencia, haciendo uso de un modelo innovador que busca garantizar la atención integral e interdisciplinaria de la población afectada, ayudando así a disminuir la saturación y los costos de operación de los hospitales.

"El 77 por ciento de las farmacias cuenta con un mecanismo para solicitar medicamentos de manera urgente y el tiempo medio de respuesta, según los responsables de las unidades, es menor a una semana. Esta mecánica de surtimiento permitiría pensar que el abasto de medicamentos es completo. Sin embargo, la información sobre existencias en inventarios mostró deficiencias importantes en la disponibilidad de medicamentos esenciales para el tratamiento de las principales enfermedades", alertó.

Sólo cuatro centros contaron con abasto completo de la lista de 17 medicamentos esenciales, definido como contar con existencias positivas de todos los medicamentos.

Como es de esperarse, indicó la investigadora, la ausencia de medicamentos en estas unidades produce gastos de bolsillo que no son despreciables y que son más frecuentes entre los pacientes de las UNEMES-EC con farmacia propia. 

Este gasto de bolsillo no debiera producirse porque prácticamente todos los usuarios de estas unidades están afiliados al Seguro Popular, que garantiza el acceso a todos ellos sin desembolso alguno.

"Con el fin de alcanzar las metas de control de las enfermedades crónicas que atienden las Unidades y para minimizar el riesgo de complicaciones, son imprescindibles la estricta adherencia a los medicamentos prescritos, cambios sostenidos en el plan alimenticio y de actividad física, y una buena relación entre el paciente y los proveedores de servicios", afirmó.

En conclusión, resumió, las Unidades deben mejorar sus niveles de abasto de medicamentos y surtimiento completo de recetas si aspiran a alcanzar mejores porcentajes de control de sus pacientes y evitarle a la población afiliada al Seguro Popular gastos de bolsillo que en la población más pobre pueden llegar a ser excesivos.

Es importante que los estados cuenten con mecanismos de comunicación fácilmente accesibles para que tanto los pacientes como los responsables de los centros de atención puedan señalar la presencia de problemas de abasto o surtimiento. Se sabe que, en general, los proveedores de servicios públicos de salud difícilmente atienden estos problemas en ausencia de presiones externas.

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