El Pulso Laboral

Lunes 25 mayo 2015

02:30 pm

Recursos Humanos

Razones que destruyen una relación laboral

Por: Adriana Rodríguez

Hay cuatro conductas tan profundas que su presencia predice el fin de una relación laboral con un 93 por ciento de precisión, afirmó John Gottman de la Universidad de Washington.

Los denominados “Los 4 Caballeros del Apocalipsis” llevan al fin de una relación. Estos elementos son muy comunes en el trabajo y cuando aparecen la productividad, el relacionamiento y el trabajo en equipo decaen notoriamente.

El primero es la crítica. La forma más conflictiva de la crítica es cuando se centra en la personalidad, el carácter o los intereses del individuo en lugar de la acción específica o la conducta que es necesario cambiar.

El segundo es el desprecio es una falta de respeto explícita hacia otro. El desprecio implica comentarios que buscan tirar abajo a otro, al igual que los insultos directos.

“El desprecio suele provenir de una falta de interés por el otro. Cuando notas que no disfrutas o admiras a alguien, tal vez hay cosas que solían resultaros interesantes y no lo hacen más, el desprecio surge. Si sabéis que no va a desarrollarse una relación, es mejor que os alejéis. La afinidad, sin importar lo pequeña que sea, es una comodidad que debe buscarse y apreciarse”, indica el estudio.

La actitud defensiva es otra. Negar responsabilidad, dar excusas, responder a un queja con otra y otras formas de defensa son problemáticas, porque evitan una resolución del conflicto. Esta actitud sólo acelera la ansiedad y tensión entre ambas partes, y dificulta la atención a las cosas más importantes.

“Para superarla, se deben comprometerse a escuchar las quejas del otro. Esto no implica estar de acuerdo, pero debes comprender su perspectiva para trabajar en pos de una resolución amigable”, afirmó.

Otro problema son las tácticas de evasión es lo que ocurre cuando una persona se rehúsa a responder, dando cierre a una discusión.

“El silencio, el distanciamiento emocional e ignorar al otro son tácticas típicas de evasión. Esto es problemático porque exaspera a quién os habla y previene la resolución de conflicto”, indicó.

La clave para superar la evasión es participar de la discusión. Si evaden porque las circunstancias que los agobian, deben dejar al otro ver cómo se sienten y pedir un tiempo para continuar luego la discusión.

“Mantén el contacto visual y una postura hacia adelante, y asiente para que el otro vea que estás inmerso en la conversación aun cuando no tienes nada que decir”, propuso.

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